Y acá va la receta de mi famosa torta de mandarina.
Dicen que hay que guardar el secreto de algo que uno hace bién, pero creo que mejor es compartirlo y buscar algo nuevo para seguir sorprendiendo a los que uno quiere...
Anoten:
1 huevo
2 mandarinas medianas
1 taza de azúcar
3/4 de pocillo de café de aceite ( si es de oliva mejor!)
1 taza y media de harina leudante
Primero ponemos el horno a calentar en máximo, luego enmantecamos y enharinamos una budinera o tortera mediana.
De una de las mandarinas hacemos jugo, de la otra la procesamos entera junto con el aceite (ojo, sacar toooodas las semillitas primero porque pueden arruinar este delicioso manjar)
Ahora mezclamos los ingredientes en un bowl. Mandarina procesada junto al aceite, el jugo, el azúcar, revolvemos bien. Le agregamos el huevo, batidito apenas. A todo esto se le va agregando de a poco la harina, se mezcla de modo envolvente y listo.
Ponemos todo esto que huele muy bien dentro del recipiente elegido, bajamos el horno a un pilín menos que mínimo y dejamos que se cocine por 45 minutos (atentti!!! el horno no se abre antes de los 45 minutos, si estás ansiosa mirá por el visor cómo se infla nuestra torta mandarinosa, pero nunca cometas ese error de principiante).
Para decorar usamos la imaginación, baño de nutella, granas de colores, azúcar impalpable que me encanta, glasé de limón, frutos rojos, flores de colores comestibles.
Acompañamos nuestra torta con un té orgánico bien negro con miel de eucalipto y jugo de lima, mmmh!.
Qué lo disfruten!
